Por norma general creemos que la creatividad es un don que sólo algunas personas poseen, pero la realidad es que se puede desarrollar y cualquiera puede tener ideas brillantes.
Por supuesto hay personas que tienen mayor facilidad pero lo cierto es que hay técnicas, y sobre todo hábitos, que nos pueden permitir llegar a ser más creativos.
En el ámbito del e-learning es muy importante SER un creativo, sobre todo para las personas que deben desarrollar el guión multimedia y que suelen ser las responsables de incorporar nuevas ideas.
Cuando creamos un curso que incluye ideas creativas es importante tener en cuenta el factor de “posibilidad técnica”. Es decir, en algunas ocasiones me encuentro con guiones que contienen explicaciones de cómo debe funcionar una pantalla, donde el creador/guionador se ha dejado llevar por pura inspiración pero no tiene en cuenta su viabilidad de desarrollo multimedia, en algunas ocasiones simplemente no son viables de realizar, o bien no son pedagógicamente correctas, o bien es tan complejo el desarrollo que encarece el presupuesto.
Consejo: construir la idea en dos fases:
- Fase 1: libertad total para crear, sin tapujos ni restricciones para proponer ideas. Todas son buenas y se analizarán para seleccionar aquellas que sean las mejores.
- Fase 2: es recomendable que un experto en el ámbito pedagógico revise las ideas seleccionadas y paralelamente consultarlo con el equipo que vaya a desarrollar el curso para que nos den su punto de vista y opciones técnicamente viables.
Lo importante es que a nuestras ideas brillantes se le aplique una dosis de sentido común para que la idea se convierta en una realidad y sean aplicables a los cursos online.
Si quieres conocer más sobre cómo aplicar la creatividad en tus cursos, te animamos a que realices esta píldora de “Creatividad en Cursos e-learning”